Con tantas empresas retornando poco a poco a las oficinas, muchos negocios buscan mejorar la infraestructura de sus redes inalámbricas para garantizar conexiones estables, seguras y de alto rendimiento y dar soporte a sus operativas diarias.
Al implementar una arquitectura de wifi empresarial, ya sea que se realice una instalación por primera vez o se actualice la infraestructura existente, es fundamental la planificación y la evaluación del espacio, así como también considerar el número de usuarios, dispositivos y la distribución de los puntos de acceso.
La infraestructura de networking es la columna vertebral de una organización. Permite a tu empresa estar interconectada las 24 horas y contar con una conexión segura y eficiente. Por eso, hay prácticas que no pueden quedar libradas al azar y deben ser atendidas.
7 claves para una arquitectura wifi óptimas
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Analizar objetivos y requisitos comerciales
Antes de instalar o actualizar una arquitectura de Wifi, primero es necesario analizar las necesidades, los requisitos y los objetivos de negocio para adecuar la inversión y realizar una implementación adecuada y alineada con sus expectativas comerciales.
¿Qué necesidades pretende cubrir? ¿Necesita sustituir la red cableada en su totalidad o sólo una parte? ¿Cuántos usuarios van a utilizar la red? ¿Prevé un aumento del número de usuarios en un determinado período de tiempo?
Al mismo tiempo, también es fundamental comprender qué tipo de equipos y dispositivos se utilizarán dentro de su nueva infraestructura de red inalámbrica: computadoras de escritorio, portátiles, dispositivos móviles, teléfonos VOIP.
Ambos aspectos son de gran importancia porque cualquier iniciativa de comunicaciones, gestión de activos digitales y colaboración en tiempo real necesita de un infraestructura de red que esté capacitada para dar soporte a esos requisitos.
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2. Realizar un Site Survey
Una vez establecidos los requisitos y las necesidades comerciales e identificado los dispositivos que integrarán la infraestructura de red, es momento de realizar una evaluación de su oficina. Este paso se conoce como Site Survey.
Un Site Survey permite evaluar los planos de planta, entender la distribución de las señales inalámbricas en el espacio físico y los obstáculos que pueden afectar la propagación de las radiofrecuencias.
Además, realizar un Site Survey ayuda a identificar las mejores ubicaciones para instalar sus puntos de acceso (Access Points) y una cobertura óptima, y permite resaltar áreas problemáticas en el diseño existente.
3. Recorrer la oficina
Junto con la implementación de un Site Survey, hacer un recorrido de la oficina a pie es una excelente forma de evaluar el espacio físico y entender cuáles son las mejores ubicaciones para los access points (AP).
En este punto, es importante prestar atención en dónde y cómo se montan los access points. Algunos factores a monitorear son:
- Que los access points de cielo raso no se instalen en las paredes.
- Que las antenas direccionales estén apuntadas correctamente.
- Que los puntos de acceso sigan patrones de propagación eficientes.
- Posibles interferencias co-canal de dos AP que intentan utilizar la misma frecuencia.
En este recorrido también es importante registrar posibles factores de interferencia de señal como estanterías de metal, microondas, paredes, y ubicaciones extrañas de los AP.
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4. Definir alcances de la inversión
El primer aspecto a considerar dentro de la inversión en infraestructura de red es el número de puntos de acceso que se necesitan para cubrir las zonas en las que interesa dar servicio. Para ello, debemos tener en cuenta tanto el número de usuarios, como las aplicaciones que los usuarios utilizan diariamente (videoconferencia, CRM, ERP, telefonía IP). También, es importante considerar la distribución de los dispositivos de red en base a las distancias, interferencias, y obstáculos sobre el plano, así como el cableado estructurado que se requiere.
Un aspecto que muchas empresas ignoran es que para asegurar una red inalámbrica confiable es necesario diseñar una infraestructura de red cableada que dé soporte al despliegue de la solución inalámbrica. La mayoría de las fallas en el servicio son ocasionadas por un sistema de cableado diseñado o implementado de forma incorrecta. Por lo tanto, es fundamental también considerar en la inversión un cableado estructurado que le dé soporte a toda la infraestructura WLAN.
5. Priorizar el uso de la red
Una vez que su arquitectura de wifi esté correctamente instalada y comience a funcionar, es muy probable que una gran cantidad de dispositivos se conecten automáticamente a su red inalámbrica. Estos dispositivos consumen ancho de banda incluso cuando nadie los está usando. En pocas palabras, su red inalámbrica puede saturarse por un uso ineficiente.
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Para resolver este posible problema, no es necesario prohibir el uso casual de la red inalámbrica, sino asegurarse de que las aplicaciones de misión crítica, como las VoIP (comunicaciones unificadas) o el procesamiento de transacciones, y los usos comerciales tengan prioridad sobre el uso casual y no comercial. Mediante una configuración de administración de redes, firewalls o WiFi Multimedia (WMM), es posible reducir el ancho de banda y asignar prioridades de uso para sus aplicaciones críticas.
6. Realizar un nuevo Site Survey luego de la instalación.
Llegado a este paso, es importante que su equipo de IT realice un nuevo Site Survey posterior a la implementación de la arquitectura de wifi con el objetivo de verificar si se está logrando la cobertura deseada. Este paso no es obligatorio y algunas empresas pueden prescindir de él para evitar gastos extra, pero es recomendable hacerlo.
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7. Practicar la gestión activa
Finalmente, la séptima clave para lograr una arquitectura wifi óptima para tu empresa. Así como la mayoría de los activos de IT, las redes Wifi necesitan mantenimiento constante. La incorporación y cambios de personal y la renovación de mobiliario y equipamiento dentro de una organización hacen que el rendimiento de la red se degrade con el tiempo y brinde un servicio menos óptimo a los usuarios.
Además, los problemas de red pueden pasar desapercibidos si no se hace un seguimiento activo. Las buenas prácticas de administración de red, incluido el escaneo regular de registros y el monitoreo constante de dispositivos y uso, ayudan a identificar problemas antes de que tengan un impacto significativo.
Otra práctica recomendada es realizar un seguimiento de las versiones de hardware y las actualizaciones de software de los dispositivos inalámbricos. Controle su antigüedad, preste atención a las potenciales vulnerabilidades y no se olvide de aplicar parches de seguridad para prevenir ataques de ransomware.
Bonus track: otras buenas prácticas para su arquitectura de wifi:
A continuación algunas otras prácticas que pueden mejorar la accesibilidad y performance de tu red:
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Realizar documentación de los requerimientos.
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Evaluar el entorno actual con mapas de calor predictivos.
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Definir el estado actual y el estado futuro deseado de la red (proyección a 5 años) .
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Creación de manuales para implementación y administración.
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Pruebas y mediciones constantes.
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Documentación final y capacitación para usuarios.
En un mundo casi 100% online y digital, la performance de la red inalámbrica es esencial. Garantizar conectividad a los sistemas y colaboradores es una tarea cada vez más fundamental para la supervivencia del negocio.
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